domingo, 24 de octubre de 2010

Sitges 2010: Monsters

Esta es una película que decepciona a medias. Decepciona porque no hay en ella lo suficiente de lo que uno espera por la promoción que la ha precedido, ni por lo que apunta en su título. Pero esa decepción se matiza por el hecho de ser la ópera prima de su director, Gareth Edwards; y teniendo en cuenta que no se puede decir que la película sea mala, uno tiene la sensación de haber tenido el privilegio de asistir al inicio de la carrera del que puede ser uno de los grandes del cine en el futuro. O por lo menos del cine de género fantástico; eso está por ver, por supuesto, pero pocos empezaron tan fuerte.


Y es que monstruos haberlos haylos, pero más como excusa para una especie de road movie por un Méjico ficticio y por sus selvas (¿?) que como eje de la historia. Si nos ponemos, seguro que podríamos imaginar razones mejores para que la pareja de protagonistas se vea metida en un embrollo parecido, sin necesidad de recurrir a lo fantástico.
Sí es cierto que, de vez en cuando, el temor a las "criaturas" y a lo que se oculta en la maleza se hace patente, y también que hay algunas escenas donde las vemos en acción; pero sin haber usado el cronómetro diría que eso no representa ni el 20% del metraje, quedando el otro 80% dedicado a ver charlar a los personajes, y a acompañarlos por una visita casi turística por un Méjico distópico en el que vemos algunos flashes de edificios derruidos, helicópteros y aviones militares sobrevolándolo y, tal vez, una columna de humo de origen incierto a lo lejos. De hecho, para mí lo mejor de la cinta está en esa distopía de la que tan solo conoceremos algunos detalles, y de la que veremos aún menos evidencias, antes que en la historia que se nos cuenta.
Que Monsters haya obtenido en Sitges el premio a los mejores efectos especiales me resulta bastante sorprendente. No puedo decir si es merecedora o no de ese galardón, porque no tuve la oportunidad de ver el resto de cintas candidatas, pero no deja de ser chocante porque yo no diría que sea una película "de efectos especiales". Lo cual es de agradecer, porque ello significa que los FX están al servicio de la historia y no al revés, pero lo cierto es que no me parece que en realidad destaque demasiado en ese apartado, en el conjunto de la cinematografía actual.
Resumiendo, creo que Monsters es una película que se puede ver, que contiene algunas buenas ideas que desgraciadamente no llegan a desarrollarse; que tiene largos momentos francamente aburridos; y que hace esperar tanto para mostrar a las estrellas del cartel, que cuando éstas aparecen, su intervención resulta decepcionante por ser incapaz de colmar las expectativas que el espectador se había creado. Y que, dependiendo de los éxitos futuros de su realizador, puede llegar a ser una cinta de visión obligada para los aficionados al cine fantástico.
Gareth Edwards, director de Monsters

Ficha de Monsters en la web del festival.

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